
¿Cómo se celebra el día de Canarias?
La Comunidad Autónoma de Canarias celebra el 30 de mayo la gran fiesta de la canariedad. 37 años ya desde que tuvo lugar la primera sesión del Parlamento de Canarias. Es decir, la reunión que oficializó la unión de todo el archipiélago bajo un autogobierno elegido por los canarios con sedes en las capitales de las dos islas más antiguas pobladas: Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife.
Esta fiesta cultural remite a la identidad Canaria tan intensa, especial y colorida. Por eso, se llevan a cabo actividades artísticas y sociales con música folclórica y exhibiciones de deportes, juegos como la Luchada, la Vela Latina, el palo o el garrote… También nunca falta esa gastronomía inimitable canaria, como las papas con mojo o el gofio.
Este año desgraciadamente no se llevarán a cabo las fiestas en las diferentes islas de Canarias a causa de la pandemia, pero no nos impide celebrar por todo lo alto la festividad canaria. En Ballesol Las Palmas por ejemplo, nos ponemos nuestras mejores galas y cantamos, creamos poesías y lo mejor de todo, comemos los mejores platos como el sancocho canario.
(¡ Mira más de este día en Ballesol AQUÍ!)

Generalmente se exhibe música, arte y teatro en las calles de Tenerife. El desfile del paseo Romero de Gran Canaria, El baile de las Taifas de Fuerteventura…
Hoy, nos queda la emoción, el recuerdo y el venir de algo mejor. No podemos dejaros la ruta y horario de actividades este año, pero sí un poema representativo de esta gran tierra.
Llamarme guanche. Llamarme guanche. Hijo de los volcanes y las lavas. Llevar la frente alta. Tener el corazón hecho de libertades. Llamarme guanche, nada más. Mi patria: un negro malpaís; mi flor: una retama. Beber agua de una fuente, descansar bajo un pino, tener la mar que me separa de todo aquello que no quiero y que me ata. Llamarme guanche. Labrar puntas de lanza, darle vueltas al barro y que el gánigo (vasija) nazca. Caminar sin caminos, subir a la montaña, mirar entre las nubes. San Borondón lejana… Tallar con la tabaona (cuchillo) en una añepa (bastón de mando) larga. En cada beñesmén (asamblea) recoger de la tierra Yrichen (grano), yoya (fruto), tamo (cebada), beber ahof (leche) de hara. (cordero lechal) Dar gracias a Achamán. (Dios) Labrar una obsidiana para mirar mi rostro de hombre libre cuando nace Magec (sol), cada mañana. Llamarme guanche. Enterrar a mis muertos en paz. No saber nada. Que el mundo se limite al norte en un volcán; alrededor de la playa. Llamarme guanche. Hundir a los navíos y a las barcas que abrieron en la mar caminos a la Isla, para robar su calma… Estarme solo. Ésta es mi tierra humilde ,ésta es mi humilde patria. Tener el corazón hecho de libertades. Llevar la frente alta. Llamarme guanche, hijo de los volcanes y de las lavas. |