
De situación problemática ambiental a emergencia climática ¿Por qué nos preocupa la educación ambiental?
“Es absolutamente vital que todos los ciudadanos del mundo insistan en medidas que apoyen un tipo de crecimiento económico que no tenga repercusiones perjudiciales para las personas, para su ambiente ni para sus condiciones de vida. Es necesario encontrar maneras de asegurar que ninguna nación crezca o se desarrolle a expensas de otra y que el consumo hecho por un individuo no ocurra en detrimento de los demás. Los recursos de la Tierra deben desarrollarse de forma que beneficien a toda la humanidad y que proporcionen mejoría de la calidad de vida de todos.”
Belgrado, octubre de 1975. Fue la primera vez que se subrayó a gran escala la preocupación sobre el desgaste de los recursos naturales y el calentamiento global. Fue donde más de 70 países se sentaron a discutir sobre cómo generar conciencia para conservar y proteger el medio ambiente. El resultado: La Carta de Belgrado. Un Texto redactado por expertos de todo el mundo donde se plasman las reivindicaciones fundamentales de la Educación Ambiental.
Desde entonces, se implementa desde el colegio, gobiernos, centros y cultura, el concepto de calidad de vida, economía circular, respeto, distribución equitativa… Utilizar la educación para formar una población mundial consciente y comprometida con el medio ambiente. Que tenga los conocimientos, aptitudes y motivación para trabajar en los problemas asociados a este y prevenir que se agraven.
¿Qué conseguimos con la “educación ambiental?
- Concienciar individual y colectivamente. La adquisición de sensibilidad y conciencia del medio ambiente.
- Ayudar a las personas a adquirir una comprensión básica del medio ambiente. Es importante, a través de actividades educativas, mostrar las nociones básicas de lo que representa el medio ambiente y cómo cuidarlo. En muchas de las residencias para mayores Ballesol, desarrollamos huertos ecológicos donde ponemos en práctica el conocimiento. Los residentes no sólo observan, sino cuidan de primera mano la tierra.
- Aportar valores sociales e interés por el cuidado del medio ambiente. Al participar en manualidades, tanto cuidar de la tierra de los huertos, como coser -entender de dónde viene el hilo, el uso consciente-, la alfarería. Los centros de Ballesol siempre se comprometen a llevar sus cursos dentro de los valores familiares de respeto y amor hacia lo que nos rodea.
- Más participación a la hora de solventar los problemas y ayudar al planeta. La educación medioambiental permite a las personas desarrollar su sentido de la responsabilidad y asegurar que adopten medidas al respecto. Por eso, en Las residencias para Mayores Ballesol tenemos especial cuidado. No solo los residentes sino el personal y las compañías que trabajan con nosotros. Siendo conscientes en todos los ámbitos. Alimentación, deshechos, cuidado de los terrenos, luz y más. Porque luchar contra el calentamiento global es cosa de todos. Debemos entenderlo y educarnos en ello.
#Ballesoltecuida #Ballesolsiempre contigo