
Nuestros residentes se convierten en “Abuelos Digitales”
El 85% de las personas mayores quieren ser abuelo digital, pero solo utilizan el móvil para hacer fotos y videollamadas, tratando de evitar con ello la brecha digital y el aislamiento familiar.
Y, en contra de lo que suele pensarse, más del 90% prioriza saber cómo manejar WhatsApp o incluso hacer llamadas mediante aplicaciones de este tipo.
Conscientes de esta realidad, Ballesol –residencias de ancianos y apartamentos tutelados– ha puesto a disposición de sus residentes el proyecto “Mayores Digitalizados” que, impulsado por SECOT (Seniors Españoles para la Cooperación Técnica) busca digitalizar a las personas mayores, reduciendo así la brecha digital.
Con motivo del Día de los Abuelos, que se celebra cada 26 de julio, os contamos que significa ser un «Abuelo Digital».
Una experiencia innovadora para las personas mayores de Ballesol
Actualmente y bajo el título “Tablets y móviles: ¿les das una oportunidad?”, se están impartiendo cursos en la residencia de ancianos en Málaga, Ballesol Cerrado de Calderón.
De esta forma, más de 30 residentes participan en esta escuela digital en la que practican cómo encender el teléfono móvil, hacer una llamada, utilizar aplicaciones o comunicarse por videoconferencia.
“Su interés en estos cursos no radica en convertirse en mayores digitales o abuelos 2.0, sino en lograr mantener el contacto afectivo, sobre todo visual, con sus familiares. Eso es lo que más les preocupa”, comparte Francisco Carvajal, miembro de SECOT Málaga y encargado de impartir estos talleres.
El objetivo de Ballesol
Uno de los objetivos de los cursos, que tienen una duración aproximada de 5 horas es, no sólo:
“Que pierdan el miedo a tocar las teclas, sino conseguir que esto suponga una estimulación mental, un nuevo aprendizaje e implique la activación de las funciones ejecutivas superiores de nuestro cerebro”, resalta Álvaro Requena, psicólogo de Ballesol.
Y, muy importante, que entiendan que sentirse capaces e involucrarse en una acción digital, representa un valor a transmitir a las generaciones más jóvenes.
Mantener la mente activa, seguir aprendiendo e incluso “poder enseñar algo a las generaciones que vienen” es el deseo de los participantes de esta experiencia digital que están viviendo los residentes de Ballesol.